SALUDO
El respeto de las normas de etiqueta es un requisito tradicional en todas las artes marciales, como garantía de trato correcto entre personas, y de seriedad en el estudio y la práctica de la disciplina elegida. El saludo es una muestra o expresión de respeto ya sea hacia sí mismo, hacia los demás o hacia el entorno.
- Saludamos para manifestar nuestra actitud sincera ante la mejora que buscamos mediante el entrenamiento.
- Saludamos a los maestros que han creado y nos han trasmitido las artes marciales; pero no por hacer esto estamos saludando a un pasado muerto y anacrónico, sino a una tradición de la que ya formamos parte.
- Saludamos al profesor que nos enseña así como al compañero que nos “presta” su cuerpo y sus acciones para que podamos aprender y al que correspondemos de manera reciproca.
El saludo es algo personal y siempre va dirigido a alguien o a algo en particular, por lo que se realiza con total sinceridad y convicción. Nunca ha de ser un gesto vacío o falso, y se ejecuta con la máxima corrección y una cierta ceremonia.
Antes de proceder a saludar, se vigilará que uno esté correctamente vestido, de modo que durante el entrenamiento, cada vez que sea necesario saludar debemos tomar la precaución de recomponer el estado de nuestra vestimenta.
En jiu jitsu, existen dos formas fundamentales de saludo: desde la posición de pie y en posición de rodillas.
RITSUREI:
Es el saludo normal en la posición de pie, que se hace antes de entrar o salir del tatami, antes y después de trabajar con un compañero, al profesor, al recibir un trofeo, diploma, etc.
Desde la posición chokuritsu, (talones juntos, abiertos los pies unos 60º) se procede a inclinar el tronco lentamente unos 30º, mientras las manos descienden a los costados. La mirada se dirige al pecho o a los pies del compañero, pues mirar a la cara o a los ojos en AAMM es
señal de desconfianza. Las mujeres saludan igual, pero colocan sus manos en la parte anterior (delantera) de los muslos.
Este saludo es de cortesía y se distingue del saludo al oponente, en el que la inclinación es menos pronunciada de (15 a 20º), se mira a los ojos y la acción es en general más breve y rápida.
ZAREI:
Desde Seiza, que es la postura natural del cuerpo en posición de rodillas y sentado sobre los talones, se apoya la mano izquierda en el suelo, sin despegar los glúteos de los talones y sin arquear la espalda. A continuación se apoya en el suelo la mano derecha.
Conservar la nuca en línea con la columna vertebral, flexionar los codos e inclinar el tronco, dirigiendo la mirara hacia el frente. La acción global de principio a fin ha de ser armoniosa y continuada si brusquedades.
Se deshace el movimiento de manera inversa.
En algunas escuelas, antes de comenzar la clase y al término de la misma, se observa un ceremonial estricto para saludar en zarei, dirigido normalmente por el alumno de mas alto grado (sempai) situado a la izquierda del profesor, que en voz alta va indicando el orden de las acciones a realizar. Hay pocas variaciones entre estilos, y básicamente sería así:
- ¡Seiza!
- ¡Mokuso!
- ¡Mokuso yame!
- ¡Shomen ni rei!
- ¡Shihan ni rei!
- ¡Sensei ni rei!
- ¡Sempai ni rei!
- ¡Otagai ni rei!
- ¡Tatte kudasai!
0 comentarios:
Publicar un comentario